LA VOLUNTAD Y UNA ACTITUD POSITIVA MUEVEN MONTAÑAS

·         En el marco del Día del Niño y la Niña te compartimos la historia de Nahelly, una pequeña y valiente guerrera del HJM.

Era agosto del año 2016, Nahelly acababa de ingresar a un nuevo ciclo escolar en 1ro de primaria, y aunque se sentía emocionada había algo extraño, porque no tenía la energía de siempre y además el “lunch” que le preparaba su mamá en casa no le parecía apetitoso, pero lo que comenzó a alarmar a sus padres, fueron las fiebres sin causa aparente que empezó a sufrir. En una consulta inicial, los médicos pensaron que se debía a las actividades de la escuela que recién empezaba, pero los padres de Nahelly, de 6 años, no quedaron conformes con esa respuesta, siguieron su intuición de que algo no estaba bien y decidieron buscar otra opinión.

Originarios del estado de Puebla esta familia viajó y buscó apoyo, un Hospital en donde pudieran atender a su hija en urgencias, así que les recomendaron el Hospital Juárez de México; llegaron un viernes, realizaron varios estudios, les dijeron que parecía una plaquetopenia (plaquetas bajas) Nahelly tuvo que quedarse por primera vez en el Hospital y le realizaron un aspirado de médula; los resultados los recibieron el miércoles siguiente, les dieron una noticia que jamás se imaginaron: el diagnóstico es “Leucemia Linfoblástica Aguda y requerirá de un tratamiento de 120 quimioterapias, una cada semana” dijo su doctora.

La noticia por supuesto rompió el corazón de los padres de la pequeña quienes no sabían qué hacer y cómo explicar a su hermanita menor (Yarinet) lo que le estaba pasando. Desde agosto hasta noviembre Nahelly sólo veía las paredes del hospital, y extrañaba demasiado a su hermanita. “Nosotros nunca dijimos –No se va a poder- al contrario, siempre tratamos de ver hacia adelante, lo difícil fue separarnos de nuestras hijas pues generalmente dábamos más atención a Nahelly que a la chiquita porque estábamos mucho tiempo en el Hospital”, dijo Carmelo, padre de las niñas.

Nahelly pasó 3 cumpleaños en el área de Oncología Pediátrica, conoció la terapia intensiva en donde estuvo dos veces debido a complicaciones en el tratamiento; el transporte cada semana desde Puebla a la Ciudad de México desgastó económicamente a la familia, pero nunca los frenó para bajar la guardia: “Nos levantábamos a las 3 o 4 de la mañana cada semana, y la niña nunca dijo que no, o expresó un –quiero dormir, no quiero ir- ella nunca puso un –pero- y eso era lo que más nos motivaba, si ella no lo hacía nosotros menos”, expresó con orgullo don Carmelo.

Nahelly parecía tener una luz y energía muy especial pues enfrentó el miedo, pero más que al tratamiento o a las jeringas, el verdadero temor era otro: “me daba miedo que mis papás se fueran y me dejaran abandonada en el hospital, quería estar siempre con mi familia” expresó la paciente de Oncopediatría.

Cómo vive un niño o niña su tratamiento durante 120 semanas en un hospital, cuando la normalidad marca que debe estar en la escuela jugando con los demás niños de su edad y aprendiendo en sus clases… Es extraño, pero los niños en las salas oncológicas aprenden a convivir, a entenderse y crear lazos afectivos incluso con niños más grandes o más pequeños, sobretodo entienden la vida desde una perspectiva muy distinta a todos los demás, algo que los hace realmente especiales. “Yo me entretenía con los juegos que los voluntarios hacían con nosotros, nos daban juguetes, regalos, dulces, conocí a mi artista favorito en mi cumpleaños y así se me pasaba más rápido” dijo Naelly que hoy tiene ya 11 años de edad a punto de entrar en la etapa de la adolescencia.

La leucemia es uno de cánceres más comunes en niños, se calcula que en México se presentan alrededor de 3 mil casos nuevos al año. La leucemia linfoblástica aguda es un desorden maligno en las células que producen la sangre, afectando a los glóbulos y plaquetas. Se originan en la médula ósea y es más común en edad prescolar, afirmó el Jefe de Oncología pediátrica del Hospital Juárez de México, Dr. Gabriel Peñaloza González.

Después de casi 3 años, esta paciente terminó su tratamiento y pasó del servicio de Oncopediatría a la Consulta Externa para su vigilancia y ahora ya tiene más de 2 años viviendo su vida casi de manera normal, de vez en cuando baja con su hermanita al río allá en Puebla y toman algunas piedras para pintar sobre ellas, pues en el Hospital aprendió algunas técnicas de pintura “un día me encontré una piedra en forma de corazón y la pinté con las iniciales de mis papás y unos muñequitos que eran mi familia”. También le gustaría ser una gran cheff, lo principal, es que no se puede borrar la experiencia de padecer esta enfermedad, lo que sí es posible, es aprender de ella a ser fuertes y a no darse por vencidos, porque los sueños y las metas se pueden alcanzar con voluntad, esfuerzo y una buena actitud, aunque muchas veces todo parezca estar en contra.

A 2 años de haber terminado su tratamiento oncológico, Nahelly es una superviviente

“En el Hospital aprendía varias cosas y cumplí uno de mis sueños”

Por Karina Olvera






Comentarios


  1. Una hermosa que tiene una gran imaginación y unas manos de artista! Sus trabajos de dibujo y pintura, sus diseños, su creatividad son de toda una profesional!!!!!!!! Tuve la dicha de conocer y fascinarme con tan bella artista ❤

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