residencias médicas

 Un breve recorrido a la historia de las residencias médicas 

Por Dr. Antonio Alonso Ramírez y Ramírez, Jefe de Residentes del HJM

El 23 de septiembre es una fecha de gran relevancia en el calendario médico, en la que cada año conmemoramos el Día del Médico Residente, en honor al natalicio del Dr. William Stewart Halsted. 

 En el Hospital Juárez de México, este día tiene un significado especial, pues no solo recordamos la entrega y dedicación de los médicos (as) residentes, sino también su papel fundamental en la atención a los pacientes, la investigación médica y la innovación en el cuidado de la salud, todo esto, mientras consolidan su trayectoria hacia la obtención de una especialidad. 

Durante la residencia médica, no solo se consolida el conocimiento y la destreza, sino que también se desarrollan habilidades humanas que serán clave en el porvenir profesional y personal de personas excepcionales. 

Estos médicos en formación se enfrentan a largas jornadas y sacrificios personales, movidos por una constante sed de aprendizaje y el objetivo de convertirse en especialistas que marcarán una diferencia significativa en la vida de sus pacientes, en el sistema de salud y en la sociedad mexicana. 

Fue en la segunda mitad del siglo XIX, cuando el Dr. Teodoro Billroth, cirujano austriaco, músico, jefe y profesor de cirugía en Allgemeine Krakenhouse de Viena, funda el primer programa de entrenamiento en hospitales que contó con aval universitario para forjar alumnos en materia de anatomía patológica, ciencias bioquímicas, rotaciones en medicina interna y en consulta externa, lo que convirtió a dicha sede en una de las entidades más importantes en la cirugía del continente europeo, secundario a la implementación del modelo Hospital-Universitario, posteriormente desarrollado y estandarizado en 1889 por el Dr. William Stewart Halsted (1852-1922) 

El Dr. Stewart Halsted, cirujano norteamericano, considerado pionero y profesor de cirugía en la escuela de medicina, estableció por primera vez el programa de entrenamiento y enseñanza quirúrgica en el Hospital Johns Hopkins de la ciudad de Nueva York, marcando una era enfocada hacia lo que sería el advenimiento de la excelencia y crecimiento del modelo de las residencias médicas, estableciendo responsabilidades graduales desde residente asistente junior, residente asistente y de manera final residente, siendo éste último quien tenía la oportunidad de participar de manera directa como su primer ayudante. 

En nuestro país, se inauguró la primera residencia médica en el Hospital General de México en abril de 1942, nombrada Dr. Eduardo Liceaga por el Dr. Gustavo Baz Prada (1984-1987) médico y político mexicano. Con un modelo rotatorio hacia los servicios de Cirugía General, Medicina Interna y Ginecología y Obstetricia. 

Hacia la segunda mitad del siglo XIX, en el Hospital Juárez de México, antiguamente nombrado hospital de San Pablo y bajo la dirección del Dr. José Ignacio Durán socio fundador de la Academia Nacional de Medicina, director de la anterior Escuela Nacional de Medicina y fundador de la Sociedad Filarmónica Mexicana (antecedente al actual Conservatorio Nacional de Música), se realiza por primera vez la aceptación de médicos para el campo clínico, siendo nuestro hospital nombrado por primera vez Hospital-Escuela. Celebremos con orgullo uno de los pasos más satisfactorios en este largo camino; extendiendo una felicitación y reconocimiento a quienes integramos cada uno de los 28 cursos de especialización que se imparten en el Hospital Juárez de México. 

“No importa lo lento que vayas, mientras no te detengas” -Confucio