LA NUTRICIÓN, EL MEDIO AMBIENTE Y EL EJERCICIO CONDICIONAN LA PROGRAMACIÓN FETAL
- Gloria Elena López Navarrete presentó la
conferencia “Programación fetal y neonatal de la salud del niño y del adulto”.
- En nuestro país hemos estado más enfocados
a la atención de las patologías y no a la prevención, dijo.
La nutrición, el medio
ambiente y el ejercicio son factores fundamentales que condicionan la
programación fetal, al inducir cambios en el desarrollo del metabolismo y la
susceptibilidad para presentar enfermedades crónico degenerativas, afirmó
Gloria Elena López Navarrete, jefa del Departamento de Seguimiento Pediátrico del
Instituto Nacional de Perinatología.
Al presentar la conferencia
“Programación fetal y neonatal de la salud del niño y del adulto”, resaltó que
en nuestro país hemos estado más enfocados a la atención de las patologías y no
a la prevención, por lo que nuestro sistema de salud está desbordado. A pesar
de que las políticas públicas ahí están, no se aplican, dijo.
Frente a este panorama, en
sesión general del HJM señaló la necesidad de que el personal médico y las familias nos
involucremos y asumamos nuestra responsabilidad, para contener los riesgos y
los graves problemas de salud que aquejan a la población.
La programación en el
desarrollo es un fenómeno transgeneracional y el efecto sobre la salud de las
personas está presente desde el momento de la concepción y pueden ser
transmitidos a las generaciones siguientes.
Investigaciones realizadas en
mujeres embarazadas durante los tiempos de hambre durante la segunda guerra
mundial, permitieron comprender el origen de los padecimientos. A partir de
este suceso se entendió la importancia de los antecedentes durante el período
prenatal.
Hizo notar que la genética y
el estado nutricional de los padres, la obesidad, así como el desarrollo y
función de la placenta, repercuten en las diferentes etapas de la vida, e
incluso contribuyen a predisponer las enfermedades.
Destacó el impacto de la
vitamina D en el organismo en las etapas fetal, neonatal y adulta, y expuso que
cien años de historia ha permitido realizar descubrimientos y comprender las
expectativas de este nutriente, que van más allá de su efecto en la salud ósea,
ya que además tiene un impacto en el desarrollo del cerebro.
También se refirió a la
lactancia materna como el regulador materno más crítico del desarrollo de su
descendencia, al proteger contra diversas enfermedades en la infancia, y a
evitar enfermedades crónicas.
La especialista del Instituto
Nacional de Perinatología calificó a la actividad física como una herramienta
de programación, cuyos beneficios previenen patologías en el bebé, y trascienden
en las siguientes generaciones.
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